El pasado lunes 22 de agosto, desapareció la pequeña Candela Rodríguez, de 11 años, en la zona de Hurlingham. La pequeña se había dirigido a encontrarse con algunas de sus compañeras del grupo Scout de una parroquia zonal al que concurría, pero nunca llegó.
Luego de analizar docenas de inconducentes llamados telefónicos, los investigadores sospechan que el padre de la desaparecida Candela podría aportar datos para dar con su paradero.
Se trata de Alfredo Laureiro Rodríguez, un hombre que se encuentra preso en el penal de Magdalena el marco de una causa vinculada a la piratería del asfalto y que dejaría su encierro solo por unas horas para prestar declaración. “Se cree que su testimonio puede servir para que se conozcan más detalles que ayuden a dar con el paradero de la niña”, admitieron los investigadores.
Por ello, se prevé que el papá de Candela declare ante el fiscal Marcelo Tavolaro, para conocer si él sabe, comprende, entiende o deduce que la desaparición de Candela podría ser un “vuelto” por uno de los delitos que él cometió.
Esta mañana, la madre de la niña se había mostrado confiada de que su hija aparezca en las próximas horas y pidió a los eventuales captores que "la devuelvan, porque es sólo una criatura".
Hay que recordar que el ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires ofreció 100 mil pesos de recompensa para quien aporte un dato certero sobre la nena.
¿Será Justicia?
Christian Sanz
Twitter: @cesanz1