Es sabido que el kirchnerismo no tolera las críticas hechas por —y hacia— sus funcionarios o respecto de las políticas que estos desarrollan. Los casos de ministros y secretarios que fueron eyectados de sus cargos por haber criticado polémicos manejos del kirchnerismo se cuentan por docenas. Algunos son conocidos, como los ex ministros de Justicia Gustavo Béliz y Horacio Rosatti; el primero separado de su cargo luego de haber denunciado el espionaje efectuado por le ex SIDE a pedido del Gobierno, y el segundo por no querer convalidar sobreprecios en licitaciones carcelarias.

     Los años han pasado, pero las mañas oficiales no cambiaron en absoluto. Por caso, luego del escandaloso sobreseimiento que obtuvo el ex presidente Carlos Menem en el marco del expediente del contrabando de armas a Ecuador y Croacia, un funcionario de la Aduana argentina fue echado de su cargo por haber cuestionado esa decisión judicial en un programa de radio.

      Todo empezó el pasado 14 de septiembre cuando el abogado Carlos Lobos Oroño, representante de la Aduana en la querella por el juicio de marras habló en el programa que la periodista Magdalena Ruiz Guiñazú conduce por radio Continental. Allí, el letrado se animó a insinuar la existencia de un pacto kirchnerista-menemista que habría oficiado de alguna manera para dejar impunes a los 18 acusados del contrabando de armas. 

     "Yo sinceramente no quiero pensar que haya un trasfondo político detrás de esto", dijo Lobos Oroño cuando la periodista dijo que habrá que esperar las proximas votaciones de Menem en el Congreso para "darnos cuenta quién le está dando su apoyo", en referencia a supuestas presiones políticas sobre el Tribunal que absolvió a Menem". Fue suficiente como para que Ricardo Echegaray ordenara su despido.

     El dato no pasó desapercibido para diario Clarín, que el 16 de septiembre pasado aseguró en su página 7 que, tanto el titular de la AFIP como la directora General de Aduanas, María Siomara Ayerán, se habrían enojado por esa entrevista. Lo que el matutino no pudo prever es que Lobos Oroño sería despedido pocas horas más tarde.

     El vínculo entre la entrevista dada por el abogado y su despido fue confirmado por una altísima fuente aduanera, quien advirtió que la eyección fue producto del enojo oficial y hasta se oficializó el viernes por la tarde a efectos de que quedara fuera de la agenda de los medios."Además de la injusticia por el fallo que absolvió inexplicablemente a Menem, Echegaray ahora se la agarra con uno de los pocos abogados de Aduana que hizo algo para lograr la condena del riojano devenido kirchnerista", agregó el informante con inevitable enojo.

     Hay que recordar que el Tribunal Oral en lo Penal Económico 3 —que absolvió a Menem y su troupe— está integrado por tres jueces, de los cuales dos son ultrakirchneristas. Se trata de Luis Imas y Horacio Artabe. El tercero, Gustavo Losada es el único magistrado no oficialista y ello explica su voto en disidencia.

     Aunque el polémico fallo de ese tribunal asegura que hubo inexistencia de delito, hay que recordar que existen varias docenas de elementos que prueban lo contrario. Por caso, una de las acusadas que fue absuelta por la decisión de los jueces, la despachante de Aduana de Fabricaciones Militares Teresa Irañeta de Canterino —ex jefa de abastecimiento de Fabricaciones Militares— había pedido en el 2008 una "probation" al mismo tribunal por su participación en la trama. Si no hubo delito, ¿por qué la mujer se declaró culpable a cambio de una pena menor? 

     Mucho podría decirse al respecto, aunque lo más oportuno es cerrar con una frase del Quijote de la Mancha: "Cosas vederes Sancho, ma non crederes".