A efectos de desgastar la marcha que se planifica para el próximo 20 de noviembre por parte de la CTA opositora y la CGT Balcarce —donde curiosamente no estará el ex kirchnerista Hugo Moyano—, Cristina Kichner anunció que exceptuará del pago de Ganancias en la segunda cuota del aguinaldo a todos los trabajadores cuyos ingresos no superen los 25 mil pesos.

En el mismo sentido, la Presidenta anticipó que se reunirá con la CGT para "discutir" una modificación de ese mismo impuesto de cara al año que viene. De esta manera, la mandataria tomará como propia una discusión que vienen reclamando los principales gremios del país. Una duda inevitable: ¿Realmente escuchará a los sindicatos o solo se juntará como hace siempre a efectos de lograr una foto de concordia?

Uno de los pasajes más polémicos fue cuando Cristina afirmó estar "orgullosa de ser de clase media". ¿Hace falta recordarle que $80 millones de patrimonio la posicionan lejos de esa proclama? ¿O es acaso una nueva ironía para alimentar la nueva manifestación que ya mismo preparan cientos de miles de personas para diciembre?

Sea como fuere, esa sola frase disparó el enojo general de gran parte de la ciudadanía, la cual impulsó una dura catarsis contra la mandataria a través de las redes sociales.

Luego llegó el turno de uno de los temas más polémicos de su gestión: "Algunos medios hablan como si fuera por magia el déficit de Aerolíneas Argentinas, como si no hubiera una crisis global", advirtió Cristina olvidando que, independientemente de la crítica o la defensa, esa firma “de bandera” no presenta balances públicos desde el año 2008.

En otro tramo de su diatriba, la Presidenta no vaciló en contradecir su propio discurso, fue al asegurar que su gobierno se encuentra "en el camino acertado frente a un mundo que se derrumba estrepitosamente". ¿En qué quedamos? ¿Afecta o no afecta la crisis mundial a la Argentina y lo que ocurre en Aerolíneas y otros nichos del Estado?

La Presidenta pareció luego hacer referencia al 8N de manera tangencial al manifestar que "tenemos que charlar todos. Basta de gritos y de imposiciones". Olvidó en ese pasaje que la sociedad marchó en paz y sin imposición alguna. En todo caso, es su propio Gobierno el que se gusta caracterizarse por el tono imperativo y la imposición de políticas de dudosa calidad ética.

Además, no perdió oportunidad para defender la Asignación Universal por Hijo e ironizó: "Si piensan que el que la recibe tiene vida de bacán, les propongo que cambien por un mes". ¿Es acaso la confesión formal de que el monto de la AUH es magro? Sería oportuno pues que ella misma tratara de vivir solo un mes sin abusar, no solo de su millonaria cuenta bancaria, sino también de los inagotables recursos del Estado.

Y si de frases polémicas se trata, hay tres que se llevan todos los premios:

-"Si uno mira del año 2003 a la fecha la cantidad de obstáculos que ha habido...él siempre me enseñó que el Estado cuando se puede y la economía lo permite hay que dar y tender la mano". Ese mensaje pareció dirigido más que nada a los militantes de La Cámpora y otras agrupaciones al kirchnerismo, las cuales se caracterizan por haber copado los lugares más redituables de los organismos del Estado.

-"Son los tiempos que él soñó y le contó a los argentinos aquel 25 de mayo hace ya casi una década". ¿Esto es lo que imaginaba Néstor Kirchner? ¿Una sociedad donde abunda la corrupción, la inseguridad y se adulteran hasta las estadísticas más básicas?

-"No es casualidad que los sectores de servicios o transportes tengan mejores salarios". ¿Un mensaje a Moyano? No debería olvidar Cristina que hace poco más de un año el hoy titular de la CGT fue el más vivaz promotor de su candidatura presidencial. También fue el principal socio de su fallecido marido.

En fin, resulta agotador observar cómo la Presidenta abusa de la cadena nacional para ahondar en falacias de todo tenor y ponerse en maestra Siruela, a explicar cómo se pueden resolver todos los problemas de la Argentina.

A este último respecto, hay un dato que jamás tiene en cuenta Cristina: la causante de muchos de los desaguisados que gusta detallar encuentran el origen en su propia responsabilidad.

Christian Sanz
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