Pasaron 22 años del momento en que el helicóptero de Carlos Menem Junior cayó a tierra, llevándose la vida del hijo del entonces presidente de la Nación. Fue el 15 de marzo de 1995.

Apenas ocurrido el hecho, se abrió una inesperada “grieta”, entre aquellos que sostenían que se trató de un accidente y los que aseguraban que en realidad fue un atentado.

Los elementos que se fueron conociendo a lo largo de los años, hicieron sopesar la balanza para el lado de este último tópico, el del asesinato.

Principalmente, hay que destacar dos peritajes, uno de ellos refrendado por Gendarmería Nacional, que demostraron que existieron impactos de bala en el fuselaje del helicóptero de Carlitos.

Si se quiere, pueden agregarse las sugestivas muertes —15 para ser más exactos— de los testigos que aseguraron que Menem Junior fue víctima de un atentado.

¿No es suficiente? Sepa el lector que hubo una carta certificada que llegó a manos de Carlos Corach un mes antes de la caída de la aeronave. Allí se advirtió que el hijo de Menem moriría luego de caer a tierra desde su helicóptero.

Y aún hay más: los pocos custodios que acompañaron a Carlitos —de los más de 13 que tenía asignados, menos de la mitad lo siguieron ese día— lo abandonaron 20 km antes de que se desplomara la aeronave. Luego dirían que habían pinchado una goma, pero fueron refutados por el dueño de la gomería donde se detuvieron entonces.

En el contexto descripto, el expediente que investiga este hecho ha cobrado fuerte impulso en los últimos tiempos, gracias al “alineamiento” judicial entre Carlos Menem y Zulema Yoma.

Es que, recién en los últimos años, el expresidente admitió que su hijo había sido asesinado. Antes solía sostener que había sido víctima de un “lamentable accidente”.

Ahora, se conoció un nuevo testimonio, que vuelve a potenciar la hipótesis del atentado. Tiene que ver con la confesión de un sacerdote que logró ver el cuerpo de Carlitos Menem minutos después de que cayera su helicóptero.

“Yo no tengo dudas de que tenía una esquirla en la frente”, aseguró el padre Andy a los micrófonos de Telefé Noticias. Acto seguido, agregó: “Yo creo que el hijo del presidente sufrió un atentado”.

El religioso jamás fue llamado a declarar judicialmente, aún cuando su testimonio es casi imprescindible. El video a continuación habla por sí solo. Uds juzgarán: