Las palabras de Axel Kicillof siguen haciendo ruido. Luego de que dijera que “hay gente que vende drogas porque se quedó sin laburo”, propios y ajenos salieron a repudiar sus dichos.

Uno de los que lo cuestionó es Claudio Izaguirre, titular de la Asociación Antidrogas de la Argentina: “En principio, lo que dijo Kicillof es una ayuda a los vendedores de drogas, una protección a los vendedores de droga que flagelan la provincia de Buenos Aires. Los pone en el lugar de vulnerables, cuando en realidad son homicidas”, sostuvo en comunicación con Tribuna de Periodistas.

Y añadió: “De la misma manera se está haciendo con los centros de rehabilitación, donde el adicto aparece como víctima y el director del lugar como victimario”.

-¿Es un comentario aislado de Kicillof o el kirchnerismo piensa lo mismo?

-Es la visión del kirchnerismo hoy. Recuerden al principio de la campaña, Alberto Fernández hablando de la liberalización de las drogas. Es la forma de captar al adicto en consumo. Y todo va en función de eso.

-Pero otros países permiten la compra de ciertas drogas…

-Sí, por ejemplo en algunos lugares de EEUU liberalizan las drogas y cobran impuestos por estos. Quienes lo hacen están en un listado especial, en general es gente que no tiene trabajo ni beneficios por parte del Estado.

-Volviendo a Kicillof, ¿cuál es la lectura para usted?

-Hoy por hoy quieren justificar el empleo pleno a través de la venta de drogas.

-¿Cuánto gana una persona que vende estupefacientes?

-Unos 15 a 20 mil pesos semanales; estamos hablando de vendedores minoristas.

-¿Existe algún país del mundo donde esté permitida la comercialización de drogas de la manera en que se plantea acá?

-No, no existe, es una bestialidad. Vista desde el punto de vista político, como no les afecta en lo personal y familiar, esta gente da un paso hacia adelante respecto de la comercialización de sustancias convirtiéndolas en benévolas. Están convirtiendo al país en una narco-república.

-¿No será mucho?

-El drama que viene es la liberalización de la venta de drogas y la restricción del tratamiento de las personas adictas. Así de simple. Seré aún más crudo y gráfico: lo que viene detrás de esto es que habrá que felicitar a los que trabajan en la trata de personas porque le dan trabajo a las mujeres que trabajan.