Tribuna de Periodistas fue el primer y único medio en hablar sobre ella. Su rastro se había perdido allá lejos y hace tiempo, en el contexto del bolso de dinero de Felisa Miceli, de quien era su asistente personal y a quien encubrió a nivel judicial.

Se trata de Mariela Pía Santarelli Goñi, quien pisa fuerte en la TV Pública como secretaria privada de Rosario Lufrano, la titular de Radio y Televisión Argentina. En realidad, es la verdadera mandamás. O al menos así se deja ver frente a los trabajadores de la TV Pública, quienes han elevado puntuales quejas por su comportamiento patoteril.

Frente a lo que está por revelarse, eso podría ser muy menor: es que Santarelli Goñi supo ser “agente inorgánica” de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), a las órdenes de Javier Fernández, el siempre cuestionado operador judicial del kirchnerismo y, a la sazón, amigo personal del presidente de la Nación. El mismísimo Alberto.

Ello explicaría cómo y por qué pudo sostenerse en el Estado luego —y a pesar— del referido escándalo del bolso de dinero de Miceli. Incluso logró permanecer durante el macrismo como secretaria de Pablo Nocetti, el jefe de Gabinete de Patricia Bullrich en el Ministerio de Seguridad de la Nación.

Una digresión aparte: Javier Fernández no solo ha sido un feroz lobista judicial del kirchnerismo, sino que además fue socio de diferentes empresarios de medios —uno de ellos ha sido el nunca bien ponderado Sergio Szpolski— y amasó una fortuna que él jura haber ganado jugando al Brinco. Eso sí, no recuerda con qué números.

Volviendo a Santarelli Goñi, ha tenido en los últimos días tuvo un fuerte conflicto con la empresa de seguridad privada Murata, reconocida por sus estrechos lazos con los servicios de inteligencia.

Se desconoce qué provocó el quiebre ni cuáles fueron sus alcances, pero en la TV Pública admiten que terminó en las altas esferas pidiendo que la empresa se retire del canal.

“No hay un solo empleado del canal que no tenga quejas contra Santarelli. En el noticiero fue la protagonista de más de un escándalo interno. Federico Maya, ex C5N, ha dicho a muchos de los subordinados que las órdenes vienen de Santarelli cuando intenta justificar alguna baja de línea de Lufrano. ‘llamaron de lo de Mariela’ parece que es la frase que genera terror en los pasillos”, dijo a este portal una alta fuente de la TV Pública.

Finalmente, un dato para indignarse: Santarelli gana 200 mil pesos de salario por mes. En comparación, podría mencionarse que el cargo más alto del hospital Malbrán araña los 70 mil pesos.

Y algo más: en su cuenta de Twitter tiene solo 40 seguidores, uno de los cuales es… Alberto Fernández. No hay remate.