A medida que pasan las horas, el misterio en torno al fallecimiento de la familia Pomar cobra más y más fuerza. Contradicciones oficiales, peritajes dudosos y desconfianza de la propia familia, hacen un condimento explosivo que promete traer nuevas sorpresas en las próximas horas.

Oportunamente, este periódico reveló que Pomar trabajaba en una empresa llamada De Marchi Hnos. dedicada a la confección de etiquetas, de donde se retiró a mediados de 2009 con una jugosa indemnización en su bolsillo.

Según un testigo de identidad reservada que sobrevuela el expediente de los medicamentos adulterados, la mencionada firma estaría involucrada en la confección de troqueles de medicamentos “truchos” utilizados para cobrar millonarios reembolsos a través de conocidas obras sociales sindicales.

En tal sentido, la experiencia profesional de Fernando Luis Pomar sería clave para entender está trama. Es que, según la página de Internet Linkedin, dedicada a “colgar” curriculums de personas que buscan trabajo, este último habría estudiado “Farmacia” y sería “experto en imprenta” (1). Todo cierra.

Pistas falsas

Uno de los argumentos que el periodismo vernáculo repitió sin vacilar en las últimas semanas como posible móvil del crimen de los Pomar, estuvo referido a posibles deudas por parte de la familia, algo totalmente irreal.

Como ha revelado Tribuna de periodistas, Fernando Pomar tenía 120 mil pesos en una cuenta del Banco Ciudad de Buenos Aires y 66 mil pesos en un plazo fijo a su nombre. Este último dinero fue el cobrado como indemnización por parte de la firma De Marchi Hnos.

Asimismo, la familia venía pagando normalmente la cuota mensual de la casa donde vivían, sin atrasarse jamás. ¿De qué problemas financieros hablan los investigadores?

Peor aún, ¿de qué vivían los Pomar si jamás tocaron el dinero de la indemnización que cobró Fernando Luis a mediados de 2009?

Otro dato que pocos conocen es que los Pomar tenían dos automóviles, ambos a nombre del padre de familia. Uno es el Fiat Duna Weekend rojo patente AEX974 que apareció volcado hace unos días. El otro es un Ford Fiesta Ambiente modelo 2005 con patente EYI817, el cual puede verse en la exclusiva foto que ilustra el presente artículo, en el garaje de la casa donde vivía la familia.

Lo que habría que preguntarse a esta altura es, ¿a quién le sirvió desviar esta investigación y por qué lo hizo?

Por ahora, es sólo una pregunta sin respuesta.

Christian Sanz

(1)   Ver http://ar.linkedin.com/pub/fernando-pomar/13/478/199