El martes 8 de febrero recibí un llamado de la Dra. Beatriz Campos, quien se encontraba sumamente enojada por un artículo de mi autoría que, unos días antes, denunciaba a su socio, el Dr. José Antonio Iglesias.
Campos estaba furiosa por que, a través de mi escrito, se habían revelado algunos oscuros antecedentes de su socio y, sobre todo, porque había desnudado sus encuentros con el ministro del Interior, Aníbal Fernández, lo cual fue admitido por el propio Iglesias en un encuentro desarrollado en la Asociación Cristiana de Jóvenes (Ver nota "Investigación Cromagnon").
Iglesias comentó en esa reunión, ante docenas de familiares de víctimas, que el ministerio del Interior le daría 2 fotocopiadoras para que pudiera hacer varias copias de la "causa Cromagnon".
En ese artículo -que provocó la ira de Iglesias y Campos- yo me preguntaba varias cosas, dos de ellas fundamentales:
-¿Era gratuito el favor de Anibal Fernandez hacia el abogado?
-¿Por qué las fotocopiadoras tenían que estar en el estudio del Dr. Iglesias y no en otro lugar?
Las respuestas que deben ser -obviamente- inquietantes nunca fueron contestadas por Iglesias. En ese contexto se entendía el llamado de la Dra. Campos.
Lo raro fue que, en medio de su enojo, Campos negó que el episodio de las fotocopiadoras hubiera ocurrido. Eso a pesar de que, horas antes de su llamado, el propio Iglesias había agradecido en Casa de Gobierno la entrega de... 4 fotocopiadoras!! No sólo yo no había mentido sino que me había quedado corto.
Aunque traté de hacer entrar en razones a Campos, quien no paraba de decir cosas ininteligibles, no pude hacer que escuchara una sola de mis contundentes argumentaciones.
La indignación de Campos era tan evidente que no le permitió decir algo lógico. Finalmente su defensa hacia Iglesias terminó haciendo agua y lo único que la mujer atinó a hacer fue intentar hacer que me despidieran de mi trabajo, algo realmente sucio.
Le dije entonces que podría hacerme una querella por calumnias, que la aceptaba gustoso, pero que no me parecía bien que se metiera con mis ocupaciones extra-periodísticas.
Campos no escuchó razones y terminó poniendome en aprietos en mi trabajo a través de falsas imputaciones. Supe en ese momento que estaba frente a la mafia, de la cual José Antonio Iglesias es la cara más visible.
Veamos a qué me refiero...
El nuevo Blumberg
José Antonio Iglesias, abogado, CUIT Nº 20-08533561-9, domiciliado en la calle Murillo Nº 639 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, es un personaje mediático que no duda en aprovechar la tragedia de su hijo para reclutar a otros familiares de la masacre de Cromagnon y ofrecerles representación. "Quién mejor que yo para llevar adelante todo esto, que sé lo que es perder a un hijo", le dijo Iglesias a no menos de tres personas entrevistadas por este periodista.
Una de ellas me aseguró que el letrado "no es más que otro idiota aprovechador de la situación como lo fue Blumberg en su momento". La persona reporteada es madre de una de las chicas que murió en la tragedia y nunca aceptó al letrado como representante.
Iglesias sabe que la comparación no lo ayuda e intenta despegarse de la desgastada figura del papá de Axel Blumberg, a quien algunos medios critican por la manera "política" que tuvo de manejar su tragedia personal. Sin embargo, el propio Iglesias admitió la comparación en una entrevista que le realizara diario La Nación el lunes 3 de Enero de 2005: "declaro a todos que les ha nacido un nuevo Blumberg...", dijo sin ponerse colorado.
Iglesias es titular del Estudio Jurídico denominado, "José Iglesias y Asociados", y de la empresa "Construcciones Mar del Plata", ambas con domicilio legal en la calle Reconquista Nº 715, un domicilio bastante sospehoso como veremos más adelante.
Según su propio Currículum, se graduó como abogado en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires y se desempeñó durante 18 años en el Poder Judicial, retirándose como Secretario de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial ante la Fiscalía.
Aceptado en un principio como único querellante de la "causa Cromagnon" por la Dra. María Angélica Crotto, Iglesias representa los intereses de decenas de familiares de víctimas que desconocen algunos aspectos de su pasado.
Iglesias sabe que al finalizar este juicio cobrará, gracias a ellos, una suma millonaria en concepto de honorarios profesionales. Debe estar feliz el letrado , ya que el dinero es su aparente debilidad. Baste ver algunas de las denuncias que ha recibido a lo largo de su carrera, algunas de las cuales fueron detalladas en la primera nota que publicara este periodista.
Veamos más datos: uno de los antecedentes más llamativos de Iglesias se desprende de su propio Currículum: fue Gerente de Asuntos Legales de The Bank of New York, banco acusado de lavar dinero y otros tantos negocios sucios. Actualmente trabaja como asesor externo del mismo lugar.
Otro indicio puede verse en la página de Internet de su estudio jurídico: tiene como consultor en derecho penal a Julio Virgolini, abogado del narcolavador Alfredo Yabrán y -oh! coincidencia- representante del grupo Callejeros, acusado también por la masacre de Cromagnon. Por lo dicho ¿Es esperable que Iglesias acuse al grupo musical en algún momento del juicio? Lo dudo.
Dinero perseguirás
Beatriz Margarita Enriqueta Campos tiene 46 años de edad y también es abogada. Su CUIT es 27-12127589-4 y se domicilia en la calle Fernandez Moreno Nº 1231, 6º "A" de esta Capital. Tiene un domicilio alternativo en Hidalgo 1230, Plata Baja y es titular del automovil Renault 11 TS, dominio VQC-858.
Es titular de la empresa Capacitores Campos SRL, sin número de CUIT y con domicilio legal en la calle Sarmiento Nº 4001 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (es interesante destacar que, si bien ese es el domicilio "legal", en el lugar hay una remisería). La firma es una empresa familiar, donde figura con la mayoría de acciones la madre de Beatriz Margarita Campos y luego sus hijos.
A pesar de que parece ser una próspera empresaria, es dable destacar que Campos fue inhabilitada el 10 de agosto de 2000 por el Banco Central por emitir no pocos cheques sin fondos por sumas que alcanzan los varios miles de pesos.
Al igual que su socia, Iglesias posee una historia financiera bastante interesante. Acusado en varias causas relacionadas con manejo de dinero, se torna evidente que, al igual que Campos, el letrado no es muy confiable para administrar fondos. Los bancos Río De La Plata e Itaú lo muestran en situación incobrable por varios miles de pesos.
Asimismo, el Banco Central inhabilitó sus cuentas con fecha 10 de agosto de 2000 por falta de fondos y su quiebra ha sido pedida en más de una oportunidad. Veamos:
-El 13/02/2001, fue pedida por Fernando Adrian Fariña a través del Juzgado Nacional De 1ra Instancia en lo Comercial Nro. 7 Secretaría 14.
-El 02/10/2000, fue el Banco Citibank quien solicitó la quiebra de Iglesias a través del Expediente 101327.
-El 07/08/2000, la firma Caravaggio SA hizo lo mismo a través del expediente 077181.
Asimismo, tal cual contáramos en nuestro anterior artículo, Iglesias fue abogado del corrupto Rubén Beraja y, consecuentemente, fue acusado por el Dr. Mateo Corvo Dolcet, en el marco de uno de los procesos seguidos contra el ex dirigente de la AMIA y otros.
En su esclarecedor –y extenso- escrito, Dolcet habla puntualmente de la actuación de Iglesias:
"Como abogado de Beraja nunca ignoró la falsedad de los "antecedentes" del contrato de fideicomiso, ni que quienes hubieran aceptado participar habrían tenido que firmar instrumentos que permitiesen a la organización alcanzar el confesado y evidente objetivo de desarmar la querella.
(...) aunque en su indagatoria pretenda negarlo, antes de la firma del contrato de fideicomiso el Dr. Iglesias supo acabadamente de la existencia de las mesas de dinero; del importe comprometido en la mega defraudación; el nombre y apellido de cada uno de los titulares de cuenta; conocía que había una oferta que, aunque inaceptable en su forma, incluía acciones de Newside entre otros bienes -por ejemplo, tierras en Villa La Angostura- y lo conocía porque participó del tema. Supo lo que pasaba. Lo supo no sólo por ser abogado del jefe de la organización , sino por que negoció junto a Schagas en representación de ésta el reclamo que mis mandantes intentaron extrajudicialmente a través del suscripto y de los abogados Azar, Settón, Vaisman y Fáes. Estuvo, además, presente en reuniones con Beraja. Y ahí no se hablaba más que de la verdad. (...)
Además, el Dr. Iglesias tenía documentado en su estudio la declaración indagatoria de su cliente; del auto de procesamiento y de su confirmación (ver carpeta "Banco Mayo - Antecedentes III"; "Banco Mayo - Obligaciones Negociables" y sobre de papel madera n°21 "Papeles varios, Banco Mayo, causa penal").
Primera premisa entonces: Iglesias sabía todo.
(...) En esa inteligencia se advierte que la alegada conveniencia de causar el contrato para que no sea nulo no justifica la elección de una causa tan ficticia como útil a la defensa de su cliente; la elección de una sociedad constituida en un paraíso fiscal, antes que beneficios tributarios, ofrece el de ocultar a sus verdaderos accionistas.
Están claros los verdaderos objetivos y los permanentes desafíos al sentido común se explican en la convicción de impunidad que habían adquirido (...) En ese contexto, y sujetándonos a los propios dichos de los imputados, queda claro que Iglesias sabía que las juntas directivas y los accionistas de The Altona y Greypark eran una ficción
De su propia indagatoria se desprende que el mandato recibido -y que pretende renunciado con las cartas enviadas a "nadie"- es falso; sabe que su falsa mandante carece de antecedentes contables, de modo que inevitablemente, debió preguntar por el origen de los fondos millonarios que aplicó a la "compra" de acciones.
Su intervención en el tema también queda expuesta en la conversación entre Beraja e Iglesias con motivo del allanamiento a las oficinas del primero (casete 30, trascripción 30, del 26/10/01, teléfono 4375-1717, lado "b", Pág. 111 de 137). Allí cambian opiniones sobre cómo atacar el procedimiento judicial ordenado, resultando en extremo elocuente la conclusión del Dr. Iglesias al opinar sobre un planteo de nulidad del allanamiento.
(...) considero probado el conocimiento del Dr. Iglesias respecto de la realidad jurídica de los hechos ventilados en el proceso seguido contra su cliente y, también y fundamentalmente en lo que respecta a este escrito, el origen ilícito del patrimonio pretendidamente transferido en propiedad fiduciaria.
Otra prueba de ello resulta de la conversación mantenida con Beraja durante el allanamiento ordenado por V.S. (ver desgrabación cinta 39, línea 1100, Pág. 63 de 145) en la que Iglesias pregunta preocupado si hay documentación en las oficinas allanadas, a lo que Beraja responde que "NO, nada; cosas de terceras sociedades; yo ni figuro, qué me voy a oponer a que la lleven…" (sic).
(...) Finalmente, debo destacar que el Dr. Iglesias mintió al responder la pregunta 29. V.S. lo interrogó sobre su conocimiento o vinculación con Israel Lublinerman y si el nombrado tuvo intervención en las gestiones para la constitución del fideicomiso Greypark. La respuesta fue NO. Pues bien. En oportunidad de efectuarse el allanamiento al estudio Lublinerman en Montevideo, de uno de los discos rígidos de las computadoras existentes en el lugar, se extrajo el dato de que el Dr. Iglesias es cliente de ese estudio, al cual la comisión parlamentaria que produjo el INFORME SOBRE LAVADO DE DINERO en la Argentina, sindicó como el más importante proveedor de sociedades cáscaras utilizadas en elusión del derecho argentino.
(...) En función de lo expuesto, El Dr. Iglesias pretendió transformar las acciones adquiridas con el dinero obtenido producto de la actividad ilícita que se investiga en la causa penal, en acciones adquiridas en el marco de inversiones lícitas. Y, como ninguna participación le cupo en los hechos delictivos que originaron el provecho ilícito que intentó transformar en lícito, creo que debe ser procesado como autor responsable del delito de LAVADO DE DINERO, previsto por el art. 278, inc. 1ro. del Cód. Penal".
El Dr. Dolcet demuestra en su escrito no sólo que Iglesias es un personaje oscuro, sino que es un mentiroso.
Más claro echarle agua.
El lugar maldito
El edificio de Reconquista 715, donde funciona el estudio de Iglesias es una verdadera caja de Pandora. Algunas de las firmas que funcionan alli también han sido denunciadas por actos de corrupción, algunos relacionados al lavado de dinero.
Por caso, en el 9no. piso funciona la firma Dicmar SA, denunciada por haber cobrado en forma indebida unos 2000 millones de pesos de reintegros del Estado Nacional en el marco de la construcción de la represa Yaciretá. El negocio, que era llevado a cabo por Guillermo Henin, era hacer pasar el cemento utilizado -que no es reembolsable- por cemento de contacto. De esa manera, Dicmar pudo cobrar los mencionados reembolsos.
En el mismo edificio, pero en el piso 5to. funciona el grupo Schawbaum, relacionado con la financiera PROFIN y no pocos escándalos de desvíos de fondos.
En fín... sólo baste ver las empresas que funcionan allí para notar que abundan las compañías financieras, algo más que sospechoso.
Por todo lo dicho, concluyo:
-¿Puede ser casual esta sucesión de hechos relacionados con el delito de lavado de dinero?
-¿Se puede permitir que el Dr. Iglesias con tan oscuros antecedentes sea querellante en una causa tan delicada?
-¿No debería haber generado un escándalo que Iglesias acepte los favores de un miembro del Poder Ejecutivo Nacional?
-¿No es una persona sumamente vulnerable Iglesias como para confiarle esta causa?
-¿Por qué no aclara el letrado todas las sospechas que se tejen a su alrededor?
-¿Por qué Iglesias demuestra actitudes que parecen salidas del seno de la mafia más que de la actividad profesional de un letrado?
-¿Cómo puede este hombre seguir ejerciendo la profesión con las denuncias que pesan sobre su cabeza?
Hasta que estas preguntas no sean debidamente respondidas, Iglesias no debería representar a ninguno de los damnificados por la masacre de República Cromagnon. De lo contrario, estamos en peligro de que se desvirtúe toda esta pelea a futuro.
Una pelea que debe ser muy cuidada para que finalmente pueda hacerse real justicia por la memoria de más de doscientos jóvenes...
Christian Sanz
José Antonio Iglesias es el mismo abogado desginado por la Justicia como Administrador de la Cooperativa de Consumo y Vivienda El Hogar Obrero. Lo que equivale decir: "ponemos el zorro a cuidar el gallinero". El proceso concursal de esa gran cooperativa ofrecía la oportunidad impar de ser una "lavadora de dinero" de imperdible perfil para los malnacidos. Todo ha sido metódicamente sometido a silencio porque cualquier vuelta de El Hogar Obrero podría entorpecer las maniobras de grandes hiper y también de los supermercados chinos. Algo para tener en cuenta. Gracias.
Perdón pero Yabrán no era el representante del grupo Callejeros lo cual conlleva a que Iglesias cambie sus argumentos y ponga la banda como uno de los principales responsables penales, y eso fue lo que hizo para desviar la verdadera culpabilidad. Es el único error que puedo acotar.